Según el experto en financias internacionales, Leonardo Buniak, al gobierno de Nicolás Maduro le quedan 800 millones de dólares en efectivo.
El economista Leonardo Buniak, experto en finanzas internacionales y petróleo, señaló que a Venezuela le quedarían menos de mil millones de dólares disponibles.
Buniak explicó a Radio Fe y Alegría Noticias que Venezuela ha visto disminuidos sus ingresos en divisas debido a una caída en la exportación y la producción petrolera. Por lo que sólo contaría con reservas líquidas de 800 millones de dólares.
Señaló que el número es importante porque esos activos permiten cumplir con obligaciones financieras como la deuda pública externa. También es el dinero con el que se adquieren bienes, productos y materia prima que se necesitan en el país.
Según su explicación, al no poder adquirir ese tipo de bienes y productos, la economía del país se contrajo entre un 35 y 40% en 2019.
«Las consecuencias son tan lamentables que debido a esa brutal caída en las importaciones, la economía cayó en un 35 a 40% en 2019. Este comportamiento se ha prolongado por los últimos cinco años y ya Venezuela acumula una caída del 75% en el producto interno bruto», dijo el experto.
Para aumentar su liquidez, el gobierno venezolano se esfuerza en vender 73 toneladas de oro que permanecen en las reservas del Banco Central de Venezuela, lo que se hace difícil por la presión que ejerce el gobierno de Estados Unidos, mediante las sanciones a empresas estatales y personas ligadas al gobierno de Nicolás Maduro.
Buniak consideró una buena noticia que la venta no sea exitosa, señalando que el país debería ser capaz de honrar sus obligaciones internacionales por medio de la exportación y no liquidando sus reservas.
«Venezuela vendió las cuentas por cobrar de PetroCaribe en 5 mil millones con descuento de 40 por ciento. Ha liquidado oro monetario del Banco Central de Venezuela y hemos perdido el oro por no ser capaces de pagar las deudas con los bancos de inversión», dijo.
Las obligaciones le quedaron a los ciudadanos
Al no poder adquirir los bienes y productos que el país necesita para su funcionamiento, Buniak observó que el gobierno nacional «se acostumbró a gobernar con poco» y delegó en los ciudadanos algunas de sus funciones.
«Ustedes busquen cómo importar y cómo financiar sus importaciones, ustedes búsquen como financiar sus plantas eléctricas, abran pozos de agua y busquen el agua que necesitan. Se está desprendiendo irresponsablemente de ciertas funciones básicas del Estado venezolano», relató.
El economista aseguró que, debido a este fenómeno, se ha formado una «economía oscura» donde fluye moneda extranjera al menudeo en el mercado local, muchas veces por medio de actividades ilícitas.
«El contrabando de extracción de oro, de gasolina, narcotráfico y otras actividades ilícitas que hoy son formales pero son ajenas a las políticas económicas y financieras de cualquier estado».
Por último, consideró que mientras no se reactive la producción de crudo, Venezuela no recuperará su capacidad de producir ingresos en divisas internacionales, pues el 96% de esos ingresos vienen de la actividad petrolera.
