El hambre sigue siendo el mayor motivo de la migración warao

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El Alto Comisionado de la ONU para los refugiados (ACNUR) publicó un informe en el mes de agosto de 2018 en el cual enumeraba los motivos por los cuales los waraos del estado Delta Amacuro huían a Brasil.

Casi cinco años después las razones de la migración de estos originarios siguen siendo las mismas, incluso hoy en día con mucha mayor intensidad.

Uno de los detonantes de mayor notoriedad era la falta de acceso a los alimentos. Esta dificultad venía dada por el alto costo de la cesta alimentaria y la nula capacidad adquisitiva de los indígenas waraos

Una de las alternativas más significativas había sido el intercambio de cestas, carteras y otras formas a partir del procesamiento de la bora como material base del arte warao.

Sin embargo, la merma de la demanda obliga a los waraos a bajar el precio de sus creaciones, cuyo valor alcanza apenas los 5 bolívares para marzo de 2022.

En los años anteriores, una cartera de bora podía ser cambiada hasta por tres kilos de productos como harina de trigo, harina de maíz, arroz, pasta o cualquier otro artículo.

El segundo detonante que persiste es la falta de acceso a medicinas. En algunos casos, personas con algún tipo de Infección de Transmisión Sexual (ITS) buscan asistencia médica fuera de Venezuela.

De acuerdo con Acnur, entre la población warao del estado Delta Amacuro existe una epidemia de VIH-Sida desde la década de 1990. Esta patología ya habría diezmado a parte de la población de comunidades enteras en el Bajo Delta.

Crisis compleja

En Delta Amacuro existe una compleja crisis que viven de firman muy especial los waraos debido a tres motivos principales.

Los planes y atenciones del gobierno nacional y regional que llegan con mayor asiduidad a la población urbana no llega con la misma intensidad a las zonas waraos.

El segundo elemento es la falta de una política que permita a los waraos sacar rédito a sus cosechas. Con la profundización de la crisis, los originarios han retornado a la siembra, pero no pueden comercializarlo porque están a cinco días de navegación en canoa.

Por el larguísimo y extenuante viaje, la cosecha tiende a perderse y los productos que llegan a la ciudad tienen menos tiempo para ser vendidos.

Y el tercer elemento es la falta de insumos médicos, personal y logística en los dispensarios de salud que hay en zona waraos. Sin capacidad para garantizar asistencia médica básica, estos centros de salud solo están abiertos, pero sin funcionar como tal.

De los cuatro municipios que tiene Delta Amacuro, dos tienen presencia indígena preponderante. Estos son los municipios Antonio Díaz y Pedernales. En el primero hay cuatro centros médicos, pero solo cuentan con personal de la comunidad.

Mientras que en el municipio Pedernales dos ambulatorios permanecen abiertos, pero sin capacidad operativa.

Estás condiciones siguen empujando a los waraos a huir de la crisis con destino a Brasil.