Los médicos consideran que la salud del papa Francisco dejó de estar en “estado crítico” y presenta una mejoría que se evidencia con “los análisis clínicos”.
Sin embargo, los médicos consideran necesario que el pontífice se mantenga en un “ambiente hospitalario” para seguir recibiendo la terapia respiratoria.
Los resultados de los exámenes de sangre y su evolución indican que el papa está fuera de peligro.
El papa Francisco está en el hospital desde el 14 de febrero
El boletín de la Oficina de Prensa de la Santa Sede que se difundió la tarde del lunes 10 de marzo, explica las mejorías del sacerdote.
Por las recomendaciones de los médicos, Francisco seguirá en el hospital Hospital Gemelli de Roma, en el que se encuentra desde el día de San Valentín.
Este martes 11 de marzo, el Vaticano informó que el papa “se despertó alrededor de las 8:00 (de la mañana)” y pasó una noche tranquila.
Desde el día de su ingreso al hospital, al máximo representante de la Iglesia católica o diagnosticaron con neumonía bilateral, que complicó su función espiratoria.
De igual forma, también se le diagnosticó y trató una insuficiencia renal. Todas las afecciones parecieran estar superadas.
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