Familiares de dos jóvenes de 20 y 24 años que salieron lesionados en el fatídico volcamiento del camión militar el miércoles 27 de enero llegando a la población de San Antonio del Táchira revelaron que se encuentran debatiéndose «entre la vida y la muerte».
Ambos se encuentran recluidos en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital central de San Cristóbal.
El señor Santos Cáceres, papá de uno de los heridos, confesó que no entiende cómo su hijo iba a bordo del vehículo ya que no era caminante, como se informó al principio sobre todos los pasajeros que transportaban los militares involucrados en el hecho donde perecieron 10 personas.
«El salió a la calle iba para el aeropuerto, de ahí no sabemos si lo reclutaron o no se que pasó pero apareció en el camión y si lo reclutaron tenían que dejarlo en Capacho y el camión volcó ya llegando a San Antonio, nosotros no entendemos», dijo Cáceres a los medios de comunicación.
De acuerdo al informe médico el joven se encuentra en estado crítico ya que presenta «un pulmón perforado, un ojo mal y hematomas en la cabeza», indicó el padre del joven de 24 años.
Por su parte, Leidy Colmenares, hermana del otro joven de 20 años, señaló que «mi hermano se encuentra grave, está en UCI, tiene una microcefalia con bastantes hematomas y pidiéndole a Dios y a las autoridades que nos ayuden porque hay bastantes costos».
Añadió que ciertamente han recibido la visita de algunas autoridades militares pero no les han aportado ningún tipo de ayuda.
Hasta los momentos no existe una versión oficial que explique por qué razón la unidad militar transportaba a civiles hacia esa zona de la frontera.
Extraoficialmente se conoció que el jefe de la REDI Andes, Ovidio Delgado, habría advertido que el primer teniente que conducía el camión había cometido un acto de irresponsabilidad ya que no estaba autorizado para cargar el vehículo.
Habría solicitado además que los uniformados involucrados se fuesen procesados por la vía ordinaria toda vez que considera que son culpables de homicidio gravoso
Este jueves el director regional de Protección Civil Táchira, Jaibert Zambrano, confirmó que la mayoría de los migrantes provenía desde el estado Yaracuy.
Por su parte, el obispo de la Diócesis de San Cristóbal, Mario Moronta, alertó a no olvidar tan rápido esta tragedia «porque son nuestros muertos y nos duelen».