El Liceo Bolivariano «Rafael Villavicencio», ubicado en la calle 53 con carrera 27, al oeste de Barquisimeto, ha sido víctima de robos constantes de sus instalaciones en los últimos años.
Veinte robos se han registrado en los últimos seis meses, afectando la calidad educativa de los más de 700 estudiantes de bachillerato que dependen de la institución.
Desde el cableado eléctrico hasta tuberías de agua han sido parte de los insumos que se han robado, generando que algunos salones estén completamente a oscuras y fuera de uso; en cuanto a los baños, solo uno de tres está en uso tanto para estudiantes como para profesores.
Karin León, sub directora del Liceo, dijo a Radio Fe y Alegría Noticias que en el último mes, prácticamente cada fin de semana ingresan delincuentes para hacer de las suyas.
“Ya no hay mucho que robar, ya se han llevado prácticamente todo, desde pizarras, carteleras, marcadores hasta nuestras tuberías y cableado eléctrico. Lo que nos dolió más fue cuando se robaron el techo de nuestro emblemático gimnasio. Allí no hay mucho que hacer”, explicó León.
La profesora León añadió que en ocasiones tiene que guardar algunas donaciones en su hogar y cargar con ellas a diario debido a que corre el riesgo de que al día siguiente no encuentre nada de lo que dejó en su oficina.
“La última vez ingresaron a dirección y sub dirección dejando un desastre y robando todo lo que encontraron a su paso. Yo cargo con todo en mi cartera, porque si lo dejo acá posiblemente no lo consiga al día siguiente. Nosotros necesitamos al menos 6 vigilantes para todo el terreno en el que se encuentra el liceo, es una extensión muy grande solo para dos vigilantes que son los que actualmente trabajan”, destacó.
León agregó que a pesar de hacer intentos con las autoridades municipales y regionales para el apoyo en recursos y vigilancia, éstos no les han dado respuesta y ya está cansada de hacer las solicitudes y denuncias cuando ellos se hacen de la vista gorda en numerosas ocasiones.
Villavicencista intentan recuperar instalaciones
Un grupo de egresados de la institución educativa se han reunido luego de estar al tanto de los robos, para intentar recuperar algunos espacios que se han perdido con el tiempo.
Egresados comentan que la institución no es ni la sombra de lo que hace una década era el Villavicencio y su objetivo es rescatar esas áreas para que las generaciones que aún hacen vida en la entidad educativa, tengan esos mismos recuerdos de sus días como liceístas.
“Cada fin de semana recibimos a un grupo de egresados del año 1973 que pintan y ayudan a la recuperación de la infraestructura. Ese ya es un paso y es de mucha ayuda para el recibimiento del próximo año escolar”, comentó Karin León.
A pesar de los robos y las constantes amenazas que han recibido los directivos de la institución, los docentes y estudiantes son los que hacen que se mantengan las puertas abiertas, apostando por la educación y formando día a día a futuros profesionales.
