El Ayuntamiento de Mineápolis, en la ciudad de Minnesota, Estados Unidos (EE.UU.) aprobó por unanimidad una resolución para reemplazar el departamento de Policía por un sistema de seguridad pública dirigido por la comunidad.
Esta decisión se da tras las protestas que se desencadenaron en esta y otras ciudades del país por la muerte del afroamericano George Floyd bajo custodia policial.
Cinco miembros del Consejo municipal sostuvieron en la resolución que el asesinato de Floyd, el pasado 25 de mayo, a manos de agentes de Policía de Mineápolis, es una tragedia que muestra que ningunas reformas evitarán la violencia letal y el abuso por parte de algunos miembros del Departamento de Policía contra miembros de la comunidad, especialmente personas afroamericanas y de color.
El documento hace referencia a que las autoridades pondrán en marcha un proceso de un año para elaborar un nuevo modelo de seguridad pública con participación de “todos los miembros de la comunidad dispuestos en Mineápolis”.
Con este objetivo, el Consejo formó un nuevo grupo de trabajo para que entregue recomendaciones antes del 24 de julio sobre cómo colaborar con las partes interesadas de la comunidad para transformar el sistema de seguridad pública.