Estados Unidos le puso precio al empresario Samark López Bello

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El gobierno de Estados Unidos nuevamente ofrece una recompensa por quien pueda dar información por otro ciudadano venezolano que haya estado vinculado al actual gobierno de Nicolás Maduro.

En esta oportunidad se trata del empresario Samark López Bello por quien el Departamento de Justicia ofrece 5 millones de dólares ya que tiene una orden de captura por supuestos ilícitos comerciales y financieros.

El anuncio también lo confirmó el Secretario de Estado Mike Pompeo, quien señaló que su despacho trabajará en conjunto con el Departamento de Justicia para proteger a su país y también para restaurar la democracia en Venezuela.

Esta no es la primera vez que López Bello es requerido por los tribunales de Estados Unidos.

Según el historial que reportan varios medios internaciones del empresario estrechamente vinculado con el actual ministro de energía y petróleo y vicepresidente del área económica Tareck El Aissami, a Samark López se le señaló el 13 de febrero de 2017, por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, como testaferro de El Aissami, quien estaba acusado de delitos de narcotráfico.

En esa ocasión Samark López se defendió negando tales señalamientos y aclarando que su vertiginosa carrera empresarial, dentro y fuera de Venezuela, siempre había sido legítima y legal.

Igualmente confirmó su nexo y relación «profesional» con el ministro El Aissami, agregando que su trato con el ejecutivo nacional siempre ha sido desde el aspecto empresarial y no de otro tipo.

López Bello también alegaba que las contrataciones que varias de sus empresas ha recibido de parte del gobierno venezolano han sido ajustadas a la ley en los ramos de medios de comunicación social, obras civiles, transporte, tecnología y alimentos.

Sin embargo, en el 2019 la Procuraduría Especializada de Antilavado de Activos, acompañada de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y agentes federales de los Estados Unidos, allanaron dos villas de un complejo turístico de Verón, Punta Cana, en República Dominicana, de presunta propiedad de López.

En la intervención se encontraron 25.000 dólares y 18.000 euros, tres vehículos todo terreno, más de 30 relojes de distintas marcas, prendas preciosas, documentos y otras evidencias, las cuales están en poder del Ministerio Público.

Con la publicación de este cartel de recompensa el Departamento de Justicia confirma que considera a López Bello como un fugitivo de su jurisprudencia.