Un grupo de trabajadores sanitarios de las locaciones de Petrópolis y Niterói, en Río de Janeiro, Brasil, habría utilizado por un «supuesto error» jeringas vacías para vacunar a ancianos contra el Coronavirus.
El escándalo estalló a través de las redes sociales por varios videos y que luego llegaron a ser publicados por las cadenas televisivas CNN Brasil y Telemundo.
A raíz de las publicaciones el Ministerio de la Salud de Brasil despidió a las enfermeras y personal paramédico que participó en la acción fraudulenta.
Las denuncias, que se dan en medio de la campaña de vacunación contra la COVID-19 en el gigante del Sur, también revelaron que se usaron pinchazos al aire y no en los brazos de los pacientes.
Mediante un comunicado, autoridades de la Policía Civil de Río de Janeiro manifestaron que “si las investigaciones confirman que hubo desvío de dosis, o cualquier otra irregularidad, el profesional de salud podrá ser acusado por el crimen de peculado (malversación de fondos), que tiene penas que pueden llegar hasta a 12 años de prisión”
El caso ha generado todo un revuelo e indignación en Brasil. Debido a esto, el s
Secretario de Salud de Petrópolis, Aloisio Barbosa da Silva, solicitó a las municipalidades reforzar los protocolos de vacunación para evitar que se den situaciones de este tipo y solicitó a los enfermeros a aumentar la “transparencia” durante el proceso.
“Brasil tiene un gran equipo de enfermeros. Un hecho aislado no puede comprometer un servicio que sigue los protocolos del Ministerio de Salud. Lo importante es tomar la vacuna”, remarcó Barbosa.
Con información de agencias internacionales
