La presidente de la Sociedad Venezolana de Infectología, María Graciela López, expresó su preocupación ante los nuevos reportes de casos de fiebre amarilla en el país.
Conversando con Radio Fe y Alegría Noticias, López aseguró que esa enfermedad tiene una tasa de mortalidad de entre 30 y 40% de los casos:
«Lamentablemente los reportes de mortalidad no son desestimables. Se estima una mortalidad que va entre el 30 y el 40% de los casos, por supuesto, es una enfermedad de cuidado», destacó.
Así se refirió López a los 3 casos de esta enfermedad reportados por la diputada de la Asamblea Nacional Manuela Bolívar en el estado Monagas.
La infectóloga aclaró que Venezuela tiene más de 100 años sin casos urbanos de fiebre amarilla. Sin embargo, advirtió que el reporte requiere que las instituciones de salud estén alerta:
«Estas declaraciones que nos da la diputada Bolívar, que es una persona oficial, no hacen más que encender las alarmas en relación a la transmisión. Si hay personas susceptibles en la comunidad, es decir, sin vacunas, la probabilidad de infección existe», dijo.
Por esa razón, consideró que el Estado debería estar vacunando a los habitantes de la zona donde se denunciaron los casos para evitar la transmisión de la enfermedad. No obstante, lamentó que no se tenga información oficial sobre las acciones preventivas:
«El punto es que no lo conocemos, me preguntas si estamos preparados o no: No soy un ente del Estado, no se internamente lo que ocurre», señaló, insistiendo en que Venezuela se encuentra en una emergencia humanitaria que hace difícil contener epidemias de este tipo.
Vacunas escasas
López recordó a la población que la fiebre amarilla puede ser prevenida con una vacuna de una sola dosis, que los ciudadanos pueden solicitar en los centros de salud pública del país.
Sin embargo, denunció la baja disponibilidad de vacunas contra la fiebre amarilla en Venezuela:
«Todos deberíamos tener al menos una dosis de fiebre amarilla (…) No tenemos reportes oficiales de cobertura de vacunación desde hace bastante tiempo. La realidad en Venezuela nos dice que, en líneas generales, la cobertura de vacunas ha sido baja», señaló.
Recalcó que desconoce la cobertura real de vacunas contra la fiebre amarilla, pero la contrastó con los casos de Sarampión y Difteria reportados en meses anteriores, asegurando que dicha cobertura debe estar en menos del 90% recomendado.
Aún así, insistió en la necesidad de que la población que se considera vulnerable acuda a los ambulatorios y pida ser vacunado para prevenir una posible infección.
Escuche, a continuación, la entrevista a María Graciela López:
