El paso fronterizo de Paraguachón que une al norte del estado Zulia con el Departamento de la Guajira en Colombia amaneció cerrado y con fuerte presencia militar colombiana este sábado 14 de marzo.
La escena obedece a la decisión del presidente de Colombia Iván Duque de clausurar, por tiempo indefinido, la frontera que su país comparte con Venezuela.
Según sus declaraciones, Duque emite esta orden para proteger al país de los riesgos de expansión del COVID-19 y cuyos problemas «ya se presentan en el vecino país», refiriéndose a Venezuela.
Esta decisión tomó por sorpresa a los venezolanos que cruzan «la raya» en busca de medicamentos y alimentos.
En el punto de control de la GNB, ubicado a pocos metros en la frontera con Colombia, se observan cientos de personas con niños en los brazos sin saber qué hacer.
Otros optan por cruzar la frontera a través de las diferentes trochas que comunica al Departamento de la Guajira colombiana, exponiéndose a los riesgos por estos caminos ilegales.
Los ciudadanos que recurren a la migración pendular le hacen un llamado a ambos gobiernos para restablezcan el diálogo y se retome la normalidad en esta frontera.
Este sábado la Guajira venezolana amaneció desolada. No funciona el transporte público y los comercios trabajan a media máquina.
Por su parte, la alcaldesa del municipio Indira Fernández informó que ya se vienen desarrollando talleres preventivos para contrarrestar la propagación del COVID-19 en la localidad.
Los talleres informativos son impartidos a los líderes comunitarios del municipio. En principio ya han participado 300 dirigentes de las comunidades, según declaraciones de la alcaldesa.
Informa de igual modo que los hospitales binacional y de Sinamaica están preparados para atender cualquier contingencia al respecto.
Fernández también le da importancia a la implementación de cuidados mediante la medicina ancestral «que tiene mucho de prevención para evitar la contaminación».
Por Eira González/Radio Fe y Alegría Noticias