El barrio 29 de mayo es el sector más pequeño dentro del casco urbano de la población de El Nula, con aproximadamente 70 casas. La mayoría de ellas hechas de madera, otras son ranchitos. Ninguna calle tiene asfalto y la comunidad tampoco cuenta con cloacas, por lo cual cuando allí llueve se convierte en un pantano, lo que se vuelve imposible para las motocicletas y peatones salir de este lugar pequeño.
Este barrio está en medio, de los barrios 11 de noviembre y La Cañada. Su población vive de la migración pendular y de algunos que se van por corto tiempo a Colombia en búsqueda de oportunidades económicas.
Actualmente el 29 de mayo vive en una gran precariedad en cuanto a los servicios básicos como el gas doméstico. A diario, se ve la humareda de la leña que las familias tienen como elemento para cocinar sus alimentos.
El nivel económico de muchas familias es deprimente: no comen «las 3 papas» porque no cuentan con los recursos para lograrlo.
En conversación con las señora Luz Marina Cabrera y Emilse Contreras, habitantes del sector, ambas ratificaron lo difícil de vivir allí, aunque no pierden el optimismo de seguir luchando a pesar de las adversidades en las que viven.
