Este 30 de julio se celebra el Día Mundial contra la Trata de Personas y la Iglesia Católica hizo un llamado a poner un freno a este delito en América Latina.
Así lo hizo saber el Secretario Nacional de la Pastoral Social de Cáritas de Colombia, Monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, quien pidió la unión de los pueblos latinoamericanos para combatir este flagelo.
«Este año 2020, el Día Mundial contra la Trata de Personas se desarrolla en un contexto muy particular que es el de la pandemia. […] Lo primero que hemos querido hacer es resaltar la vulnerabilidad que tienen las personas en momentos de pandemia y de crisis y buscan actividades productivas en otros sectores donde pueden ser víctimas fácilmente de la trata, habidas cuentas de las situaciones desesperadas», dijo Henao.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, el 49% de las víctimas de trata en todo el mundo son mujeres y el 30% niñas. Generalmente, las víctimas terminan usadas para la explotación sexual, mendicidad, matrimonios forzados y hasta para reclutar a los más pequeños como soldados.
Trabajo en red y con creatividad
Mientras tanto, el equipo «No a la Trata» de la Comisión Nacional de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Argentina recomendó «trabajar en red y con creatividad para combatir el delito aberrante de la trata».
Rodolfo Brandan, coordinador del equipo, declaró a Vatican News que la pandemia también hace crecer la «pandemia económica» y, en medio de la desesperación, muchas víctimas son arrastradas más fácilmente.
Por ese motivo, considera que la solidaridad de la Iglesia y la sociedad son fundamentales y, junto al Estado, es más fácil combatir este delito:
«Las redes delictivas tienen mucha creatividad al aprovechar estas situaciones y, por lo tanto, nosotros también como sociedad tenemos que responder con esa misma creatividad tratando de dar respuestas a todos los inconvenientes que nuestros hermanos y hermanas más vulnerables van teniendo durante este tiempo de pandemia. Nuestra solidaridad es clave para enfrentar esta situación», aseguró.
Enfatizó en que la participación del Estado es muy importante, pues cuenta con los medios y recursos para contenerlo.
«En la persecución del delito, en la condena a los delincuentes, condenas ejemplares, en la restitución de derechos de las víctimas. Hay programas de asistencia y de restitución de derechos que a veces no salen adelante porque no hay presupuesto, y esto depende de una decisión política», señaló.
Por último, relató que su equipo celebró el foro virtual «Juntos Contra la Trata» con el fin de visibilizar la situación que se vive en torno a la trata de personas y educar a la comunidad respecto a cómo enfrentarlo.
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Con información de Aler, Contacto Sur y Vatican News.
