La canciller alemana Ángela Merkel llegó este domingo 18 de julio a la localidad de Schuld, en Renania-Palatinado, una de las más afectadas por las inundaciones y deslaves, que dejan ya 156 muertos. Una escena sin precedentes en Alemania.
Al revelar que no encontraba palabras para describir lo que había pasado con esta catástrofe natural, confirmó el anuncio de su gobierno federal. Dispondrán de más 300 millones de euros para activar un plan de ayudas.
Merkel empezó a recorrer la pequeña población de Schuld, de unos 700 habitantes, que quedó prácticamente arrasada por las aguas del río Ahr, afluente del Rin.
Estuvo acompañada de la jefa del Gobierno regional, la socialdemócrata Malu Dreyer, con quien tiene previsto comparecer ante los medios a primera hora de la tarde, tras recorrer otros puntos de la región.
Después de que se rompiera una presa en el Rur no se ha podido todavía levantar la alarma en Wassenberg, en Renania del Norte-Westfalia. Aún no se conoce el alcance de los daños causados por la ruptura.
El nivel del agua ha descendido en todos los distritos. En el distrito de Ophoven no se descartaba la posibilidad de la rotura de más presas, anunció la ciudad el domingo (18.07.2021). «La situación es bastante confusa», dijo un portavoz de los bomberos. Unos 700 residentes de Ophoven, junto a la frontera con Países Bajos, tuvieron que abandonar sus viviendas durante la noche.
También en el pueblo de Ohe se restauró en su mayor parte el suministro eléctrico y se permitió que algunas personas regresaran a sus casas. Se ha levantado la advertencia anticipada de evacuación en las aldeas de Effeld y Steinkirchen. Se pidió que la gente se abstuviera de realizar visitas innecesarias a las zonas inundadas.
Por lo pronto, el alarma por el desbordamiento de otros ríos continúa. Las autoridades alemanas son pesimistas. El número de víctimas pudiera aumentar con el paso de los días a medida que los equipos de rescate acceden a las áreas más devastadas y encuentran los cuerpos de personas atrapadas por las intemperies, que también causaron destrozos materiales en Luxemburgo, Bélgica Holanda y Suiza.
Con información de agencias internacionales