La Red de Centros Sociales de la Conferencia de Provinciales de la Compañía de Jesús en América Latina y El Caribe, Cpal, presenta en su boletín de este mes de febrero un análisis sobre la reelección de Nayib Bukele como presidente de El Salvador.

Nayib Bukele, el joven presidente salvadoreño, no puede considerarse un outsider en el sentido tradicional del término. Entre 2012 y 2018 fue alcalde, primero, de Nuevo Cuscatlán y posteriormente de la capital San Salvador por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional.

En 2017 fue expulsado de dicha organización y fundó su propio movimiento denominado Nuevas Ideas. En 2019 se postuló a la Presidencia de la República, ganando cómodamente en primera vuelta con más del 53% de los votos.

Su consigna “los mismos de siempre” para referirse de manera peyorativa a las élites políticas y económicas del país, y el uso de
las redes sociales fueron las claves para que su discurso llegará al pueblo.

El Salvador es el país más pequeño de América Central y ha tenido un crecimiento económico modesto que según el Banco Mundial ronda el 2,5%, logrando una disminución sostenida de la pobreza y la desigualdad.

El país centroamericano aún ostenta las cicatrices de la guerra civil ocurrida en los años ochenta del siglo pasado, que dejó un saldo de más de setenta mil muertos.

Luego de la guerra, la violencia no ha cesado. El tráfico de drogas, armas y personas se apoderó del país de la mano de las bandas criminales juveniles.

Para mediados de la década de los 2000, El Salvador llegó a convertirse en uno de los países más violentos del mundo con una tasa de homicidios de 55 por 100.000 habitantes.

Al llegar al poder, Bukele implementó una política de seguridad denominada “plan de control territorial” con el apoyo de la Policía Nacional Civil y el Ejército, y desde el año 2022 hay un régimen de excepción que ha intensificado las detenciones masivas.

Según Amnistía Internacional (2023) la política del Presidente ha provocado la detención de más de 66.000 ciudadanos. Gran parte de las detenciones se han caracterizado por malos tratos, torturas y violaciones al debido proceso. Según la misma organización esta política criminaliza la pobreza y requiere de una organización y planificación estatal diseñada para la impunidad.

Con Bukele El Salvador se ha convertido en el país con la mayor población carcelaria, los privados de libertad superan los 100.000 y aproximadamente el 10% de la población está detenida.

Según cifras oficiales la tasa de homicidios bajó en 2023 a 2,2 por cada 100.000 habilitantes; pero estas cifras no pueden ser contrastadas por organizaciones civiles debido a la falta de transparencia por parte del gobierno.

Según un estudio realizado en 2023 por el Instituto Universitario de Opinión Pública de la Universidad José Simeón Cañas la población apoya de manera contundente la política de seguridad, y la destaca como el principal logro del Presidente.

Las cifras que arroja este estudio son impresionantes: 89% considera que Bukele representa un cambio positivo para el país y 70% considera que ha cumplido sus promesas de campaña. Los cambios favorables señalados por los ciudadanos se orientan a una
mayor seguridad, la lucha contra las pandillas y la reducción de los homicidios.

Erosión de la democracia

Según el informe de Latinobarómetro correspondiente a 2023 la democracia en El Salvador “está en alto peligro”. Para el barómetro, el efecto Bukele no está haciendo más robusta a la democracia sino más bien vuelve más poderoso al Presidente.

De hecho, la encuesta muestra como Bukele es el Presidente mejor evaluado de todos los tiempos desde el inicio de las transiciones en nuestra región, alcanzando un 90% de aceptación.

De igual manera, la encuesta muestra que el 26% de los salvadoreños se muestra indiferente al tipo de régimen, sólo el 46% apoya a la democracia, al tiempo que los autoritarios alcanzan al 15% de la población, porcentaje que supera a numerosos países de nuestra región.

Hasta ahora Bukele no tiene rival, los partidos tradiciones tampoco han trabajado en la articulación con la sociedad civil de alternativas, más allá de las críticas a la gestión del Presidente.

El poder judicial ha sido también permeado por el Ejecutivo. Para numerosos sectores de la sociedad civil salvadoreña, la reelección es inconstitucional, pero una resolución de la Corte Suprema de Justicia en 2021 le permitió participar. Ante este escenario y sin contrapesos en los poderes públicos, el segundo mandato de Bukele implica una amenaza cierta para la democracia.

El Presidente autodenominado el “dictador más cool del mundo” se burla de Organización de Estados Americanos, del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas y de Amnistía Internacional entre otras; que han mostrado preocupación por su deriva autoritario.

El nuevo mandato de Nayib Bukele profundizará la crisis de la democracia. El Salvador es hoy la expresión de un falso dilema entre libertad y seguridad; en el que se sacrifica la primera en aras de mantener la segunda

La construcción de megacárceles, y los juicios masivos no son la respuesta al grave problema de seguridad que afecta a El Salvador; pero el
éxito logrado en la lucha contra la criminalidad no admite ningún tipo de cuestionamientos a lo interno.

El Presidente salvadoreño es el dueño de un nuevo formato autoritario, que esconde los mismos vicios de las dictaduras del siglo XX.

Nota informativa: Este sábado 17 de febrero el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de El Salvador ratificó la victoria de Nayib Bukele, del partido oficialista Nuevas Ideas (NI), en los comicios presidenciales del pasado 4 de febrero, con más de 2,7 millones de votos, equivalente al  84,6 % de respaldo electoral. El ente electoral emitió el acta de escrutinio final de la elección de presidente y vicepresidente de El Salvador para el periodo 2024-2029, en la que ratifica los resultados de la elección.

Para ampliar la información:

  1. Cartagena, M. (2020). Dios, twitter y los militares. El Salvador de Nayib Bukele. Disponible en: https://nuso.org/articulo/salvador-bukele-twitter-dios-militares-derecha/
    2. Dammert, L. (2023). El modelo Bukele y los desafíos latinoamericanos. Disponible en: https://nuso.org/articulo/308-modelo-bukele-desafios-latinoamericanos/
    3. Espinoza, C. (2024). Encuesta UCA. Régimen es el pilar de la popularidad de Bukele. Disponible en: https://www.laprensagrafica.com/elsalvador/Encuesta-UCA-regimen-es-el-pilar-depopularidad-de-Bukele-20230119-0087.html
    4. La voz de América. Bukele arrasaría en una elección presidencial. Disponible en: https://www.vozdeamerica.com/a/bukele-arrasaria-elecciones-presidenciales-el-salvador-2024- encuesta/7359981.html
    4. Latinobarómetro (2023). Informe Latinobarómetro 2023. La erosión de la democracia. Disponible en: https://www.latinobarometro.org/lat.jsp
    5. Núñez, R. (2019). Elecciones en El Salvador, un fiel reflejo del momento político latinoamericano. Disponible en: https://www.realinstitutoelcano.org/analisis/elecciones-en-el-salvador-2019-unfiel-reflejo-del-momento-politico-latinoamericano/
    6. Quintanilla, (2023). El modelo Bukele. Cuando el autoritarismo se vuelve popular. Disponible en: https://nuso.org/articulo/Bukele-megacarcel-pandillas/

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