La lava que fluye de un volcán en erupción en las Islas Canarias de España acelera su camino hacia el mar y ahora se encuentra a 800 metros de la costa, dijeron este martes las autoridades.
Mientras que un río de lava se ha ralentizado en la isla de La Palma, el otro estaba más caliente y fluido.
Ese segundo golpeó el martes a la pequeña ciudad de Todoque, cuya gente ha sido evacuada, dijo el departamento de respuesta a emergencias volcánicas de las Islas Canarias.
Durante días, las autoridades han estado esperando nerviosamente el momento en que la lava de la erupción del 19 de septiembre llegue al Océano Atlántico, pero el volcán ha estado errático.
Después de calmarse el lunes, el volcán volvió a ser más explosivo durante la noche.
Cuando la roca fundida finalmente se encuentra con el agua del mar, podría desencadenar explosiones y la liberación de gas tóxico, aunque las autoridades dicen que no esperan que la lava de movimiento lento cree una gran interrupción en la costa.
Destrucción a su paso
La Palma, hogar de unas 85.000 personas, es parte de las volcánicas Islas Canarias, un archipiélago frente al noroeste de África.
La isla tiene aproximadamente 35 kilómetros de largo y 20 kilómetros de ancho en su punto más ancho.
La lava de la erupción ha devorado todo a su paso, destruyendo 589 edificios y 21 kilómetros (13 millas) de carreteras en La Palma.
La lava ahora cubre 258 hectáreas, en su mayoría tierras de cultivo, según una agencia de monitoreo satelital de la Unión Europea.
No se han reportado víctimas mortales ni heridos graves, gracias a las rápidas evacuaciones de más de 6.000 personas.
Pero la población local ha perdido sus hogares y sus medios de vida al mismo tiempo. La agricultura es uno de los pilares económicos de la isla, junto con el turismo, y la lava y la ceniza han arruinado los cultivos y los sistemas de riego, han puesto en peligro la aviación y representan un riesgo importante para la salud de las personas cercanas.
El gobierno español anunció después de su reunión semanal de gabinete el martes que proporcionará una subvención inmediata de 10,5 millones de euros para comprar 107 propiedades para realojar a la población local y también proporcionarles ayuda económica.
Se enviará más ayuda, incluida la reconstrucción de infraestructura pública, una vez que termine la emergencia actual, dijo la portavoz del gobierno Isabel Rodríguez.
Hasta ahora, el volcán ha arrojado más de 46 millones de metros cúbicos (1,6 mil millones de pies cúbicos) de roca fundida, según el Instituto de Vulcanología de Canarias.
Fuente: AP, medios locales
