La Comisión para los Derechos Humanos del Estado Zulia, Codhez, presentó la segunda parte de su estudio sobre la situación de las madres con hijos en desnutrición y bajo peso que asisten al Servicio de Nutrición del Hospital Universitario de Maracaibo.
“En esta segunda entrega, hablamos de quién es esta mujer, cuáles son sus características psicosociales, su entorno”, precisó a Radio Fe y Alegría Noticias, Lisseth Mogollón, coordinadora de Empoderamiento de Codhez.
Mogollón explicó que “si bien la mayoría de las madres en situación de inseguridad alimentaria tienen formación académica para conseguir empleo, 30% de ellas tiene un trabajo remunerado y el 70% restante son amas de casa”.
Marcadas por la depresión y la ansiedad
La primera parte del trabajo que expuso Codhez en noviembre de este año develó cómo la inseguridad alimentaria genera consecuencias directas y negativas en el estado psicológico de las personas.
Entre los hallazgos, se encontró que 56.7% de las madres encuestadas en el servicio de nutrición manifestaron síntomas de depresión moderada, como consecuencia de un estado de frustración y preocupación en torno a la seguridad alimentaria.
Además, 13.3% de las madres encuestadas expresaron síntomas severos de depresión, caracterizados por tristeza, llanto y afectación en su funcionamiento social, laboral o académico.
“En la primera parte, nosotros hicimos un listado de posibles síntomas que podían ser sudoración, sueño extremo, insomnio, llanto repentino, cambios de humor, tristeza profunda y, en algunos casos más extremos, el impedimento para realizar sus labores”, destacó Mogollón.
Y detalló que se produce una situación de aislamiento “porque ellas reconocen que están tristes; no tienen deseos de trabajar. No dejan de lado el cuido del hijo, sino que más bien lo hacen con una tristeza profunda”.
Los otros detonantes de la depresión
La abogada también refirió que hay otros detonantes de depresión y ansiedad en las madres marabinas más allá que la desnutrición en sus hijos: uno de ellos, la calidad de los servicios públicos.
“El hijo desnutrido es la razón principal, pero también todo lo que envuelve la crisis humanitaria compleja, por ejemplo, los servicios públicos: se preocupan por la preservación de alimentos que por fin podían obtener. En las entrevistas observamos que para ellas era preocupante porque el servicio eléctrico era precario en sus zonas”, narró.
De acuerdo con la Comisión para los Derechos Humanos del Estado Zulia, esta investigación documenta la vulnerabilidad de las madres marabinas en su entorno y modos de vida, centrándose en las necesidades de la población femenina.
Según el informe, “los resultados evidencian que los esquemas sociales impuestos a la mujer, tales como la maternidad a temprana edad y el rol de madre cuidadora, fortalecen esquemas de vulnerabilidad para las mujeres marabinas”.
Y en cuanto a la violación al derecho a la alimentación “se evidencia que no solo tiene incidencia en el desarrollo físico de las personas, sino que produce consecuencias secundarias en cuanto a síntomas a la predisposición a trastornos depresivos o de ansiedad”.