El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, junto a la Organización Marcha Patriótica y la Cumbre Agraria Campesina Étnica, publicaron un informe que revela que unos 971 líderes sociales fueron asesinados en Colombia entre 2016 y 2020.
De acuerdo con el documento, sólo en 2020, el número de asesinatos a defensores de Derechos Humanos se ubicó en 166. La mayor parte de ellos eran campesinos que defendían los derechos de acceso a la tierra.
También, fueron asesinados líderes de movimientos que luchaban contra proyectos mineros y extractivistas que afectan el derecho a la alimentación de los indígenas y campesinos.
Según los autores, la idea detrás del informe es llamar la atención de los gobiernos de Colombia y América Latina para que generen políticas que garanticen el derecho a la vida de quienes lideran movimientos populares y que reciben a diario amenazas por defender a la gente.
De acuerdo con el dirigente de Marcha Patriótica, Cristian Delgado, el documento no sólo incluye a personas vinculadas a organizaciones sociales, sino a individuos involucrados en otras actividades de visibilización.
Sin embargo, para el defensor de Derechos Humanos Camilo González, los registros se quedan cortos para precisar lo grave de la situación en esos territorios.