José Luis Hernández Martínez cruzaba Ciudad de México todos los días en la Línea 12 del metro, entre su casa en el sur de la ciudad y el taller de carrocería donde trabajaba reparando vehículos chocados.
El hombre, de 61 años, viajaba el lunes por la noche en un tren que había salido del subsuelo de la ciudad y circulaba por un tramo elevado lejos del centro cuando dos de sus vagones naranjas cayeron de pronto al vacío.
Hernández Martínez murió en el acto, indicó su hijo, Luis Adrián Hernández Juárez. Es uno de los fallecidos de uno los peores accidentes de metro del mundo que se cobró la vida de 25 personas, según la última cifra dada a conocer por la fiscalía capitalina el martes por la noche. Más de 70 personas resultaron heridas.
Aunque podría tomar meses determinar qué provocó el accidente, y más aún identificar a un responsable, los familiares de muchas víctimas afrontan necesidades inmediatas provocadas por la pérdida de sus cabezas de familia.
«Yo quiero justicia para mi esposo»
Gisela Rioja pasó el lunes por la noche y el martes por la mañana recorriendo los hospitales de la ciudad en busca de información sobre su marido, Miguel Ángel Espinosa Flores, que trabajaba en unos grandes almacenes a unas pocas paradas del lugar del accidente.
Lo encontró el martes en una morgue en el barrio de Iztapalapa. Lo describió como trabajador, responsable y feliz. Ella y sus dos hijos dependen de sus ingresos.
«Yo quiero justicia para mi esposo porque no con un simple perdón va a regresar con nosotros», dijo. “Para mí era un amor, para mí era todo. Me duele mucho, mucho, mucho por cómo terminó ”.
La ira y la frustración bullían entre los familiares de las víctimas y los que utilizan cada día la amplia red del metro.
Entre tanto, la alcaldesa Claudia Sheinbaum instó a la población a evitar especulaciones y prometió una investigación profunda e independiente. Las autoridades esperan presentar un primer informe preliminar sobre accidente el viernes.
“Va a haber justicia”, dice AMLO
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que habrá justicia para todas las víctimas del derrumbe de una trabe en la Línea 12 del Metro, al mismo tiempo que llamó a no usar la tragedia con motivos políticos y electorales.
El mandatario apuntó que no hay una fecha aproximada para terminar las indagatorias, pues éstas corresponden a la Fiscalía General de Justicia y la empresa externa que contrató el gobierno capitalino, con la que ya se estableció contacto para llevar a cabo los peritajes.
Por último, envió un abrazo y se solidarizó con los familiares de las víctimas que resultaron heridas o fallecieron.
Prometió que se continuará informando sobre los avances de las investigaciones de estos “tristes acontecimientos”, para deslindar responsabilidades y castigar a los culpables.
Funente: AP, El Milenio
