No hay distinción de sexo, delitos o enfermedades en centros de reclusión de Anzoátegui

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El hacinamiento ha alcanzado niveles alarmantes en distintos centros de reclusión del estado Anzoátegui.

Así lo denunció el abogado y defensor de los derechos humanos, José Santoyo, quien afirmó que la situación no es distinta a otros estados del país.

De acuerdo al seguimiento que ha hecho en los distintos recintos carcelarios de la entidad, desde enero de este año ha podido constatar las precarias condiciones de estos centros que sobrepasan de manera exponencial la capacidad para la que fueron construidos.

De acuerdo con el jurista, en algunos centros no hay distinción de sexo, delitos o enfermedades.

«Se ha podido constatar el embarazo de privadas de libertad que tuvieron relaciones sexuales con otros internos debido a que los reos no están separados por sexo», expresó el penalista.

De igual manera advirtió que hay presos con una orientación sexual distinta (LGBTQ) que cumplen condena con la población común y son víctimas de maltrato.

En cifras

En relación al hacinamiento en los distintos centros de reclusión en la zona norte de Anzoátegui, Santoyo detalló:

  • PoliAnzoátegui PLC: Capacidad para 30 hombres – Alberga a 180 hombres / No aceptan mujeres
  • PoliBolívar Las Casitas: Capacidad para 20 hombres – Alberga a 236 hombres / No aceptan mujeres
  • PoliBolívar Colinas de Neverí: Capacidad para 20 hombres – Alberga a 15 funcionarios / Aceptan mujeres
  • PoliSotillo Chuparín: Capacidad para 50 hombres – Alberga a 397 hombres / Aceptan mujeres
  • PoliSotillo El Paraíso: Capacidad para 10 hombres – Alberga a 19 con distintas enfermedades / Aceptan mujeres
  • PoliAnzoátegui Lechería: Capacidad para 80 hombres – Alberga a 312 con distintas enfermedades / Aceptan mujeres
  • PoliGuanta: Capacidad para 30 hombres – Alberga a 155 con distintas enfermedades / Aceptan mujeres
  • PoliUrbaneja: Capacidad para 22 hombres – Alberga a 32 con distintas enfermedades / No aceptan mujeres

En el caso del Internado Judicial José Antonio Anzoátegui, mejor conocido como el penal de Puente Ayala, construido en 1983 bajo el mandato de Luis Herrera Campíns, detalló que tiene capacidad para 400 hombres, sin embargo alberga a 6 mil 800 personas.

Ellos conviven con distintas enfermedades y en condiciones desde todo punto de vista violatorias de los derechos humanos.

Caso no muy distinto en el Agroproductivo José Antonio Anzoátegui, ubicado al lado, el cual debería albergar 520 hombres de acuerdo al espacio, sin embargo tiene 1.600 reclusos.

En estos dos centros penitenciarios no reciben mujeres privadas de libertad.

Estos niveles de sobrepoblación penitenciaria han generado brotes de paludismo y tuberculosis, entre otras enfermedades.

Radio Fe y Alegría Noticias ha recibido denuncias de parte de familiares que han dado fe de cómo el hacinamiento y las condiciones de insalubridad agravadas con la escasez de agua, han minado el estado de salud de estos internos, llegando a fallecer algunos por falta de atención médica.