La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, informó que el Coronavirus en su país fue eliminado «de momento».
El número de nuevos casos en la nación lleva días en números de un dígito y el domingo cerró con un sólo nuevo contagio.
«No existen casos de transmisión comunitaria sin detectar en Nueva Zelanda. Ganamos la batalla, pero debemos permanecer atentos si queremos seguir de ese modo», dijo Ardern ante medios internacionales.
Tras la noticia, las autoridades neozelandesas decidieron bajar el nivel de confinamiento de cuatro, a tres, a partir de este martes.
Esto significa que los restaurantes de comida para llevar y otros negocios que no requieran contacto cara a cara podrán abrir sus puertas.
Sin embargo, las concentraciones siguen prohibidas, lo que significa que los centros comerciales y escuelas, seguirán cerrados y la gente deberá seguir en sus casas.
«Estamos abriendo la economía, pero no la vida social de las personas», advirtió la primera ministra.
Por su parte, el director general de Salud, Ashley Bloomfield, dijo que el bajo número de casos «nos da confianza de haber alcanzado nuestra meta de eliminación».
Sin embargo, aclaró que con eliminación no pretenden decir que no habrá nuevos casos, sino que «sabemos de dónde vienen» y pueden controlarlos.
