El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, admitió que puede que «nunca haya una solución» contra la pandemia por el nuevo Coronavirus.
Ghebreyesus declaró que aunque hay esperanzas en los ensayos clínicos, la Organización está preocupada de que no se consiga una vacuna eficaz.
«Varias vacunas se encuentran en la fase tres de las pruebas clínicas y todos esperamos que de ellas salgan vacunas eficaces que ayuden a que la gente no se infecte, pero ahora mismo no hay una bala de plata y puede que nunca la haya», dijo el funcionario durante una conferencia de prensa desde Ginebra.
Hizo énfasis en la necesidad de seguir luchando contra la cadena de transmisión como la principal medida para combatir la enfermedad.
«Pruebas, aislamiento, tratar a los pacientes y rastrear y aislar a sus contactos. Mascarillas, distancia de seguridad, higiene frecuente de manos… Háganlo todo», exclamó.
Igualmente, aconsejó a aquellos países que han podido controlar la enfermedad que mantengan la vigilancia, advirtiendo que un levantamiento prematuro de las restricciones podría dar lugar a rebrotes.