La creciente ola de violencia y los enfrentamientos a los que se han sumado los grupos étnicas más importantes del país, apuntan a una eventual guerra civil.
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, manifestó su preocupación sobre lo que ocurre en Birmania y el riesgo que existe de que ese país se hunda en un conflicto generalizado como en Siria.
«Temo que la situación en Birmania se dirija hacia un conflicto generalizado. Los Estados no deben permitir que se repitan los errores fatales que se cometieron en Siria y otras partes», declaró Bachelet en un comunicado.
La Alta Comisionada apuntó la falta a los derechos humanos que está cometiendo la junta militar, como ocurrió recientemente con las condenas a muertes a civiles; por haber participado en las manifestaciones contra el reciente golpe de Estado.
Bachelet, advirtió de que la situación ha llegado a tal extremo de violencia que se teme el estallido de una guerra civil.
Solo este fin de semana los militares asesinaron a, por lo menos, 82 personas en la localidad de Bago, con lo que el número de muertos en el contexto de las protestas supera el medio millar.
«Los arrestos continúan, con más de 3 mil personas detenidas y hay informaciones de que 23 personas han sido sentenciadas a muerte en juicios secretos», dijo la portavoz de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani.
Fuente: dw.com