De acuerdo con un comunicado «de las fuerzas democráticas de Venezuela», distintos partidos políticos de Venezuela rechazan la designación de nuevos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia.
En la carta, «rechazamos de manera firma y categórica la pretensión (…) de convocar una farsa electoral parlamentaria que, sin contar con las condiciones mínimas de transparencia, confianza y libertades públicas, solamente servirá para agravar la actual crisis política y humanitaria que azota a todos los venezolanos, dejando como resultado miseria y destrucción».
Aseguran «la ilegitimidad de esta acción, que se dio sin permitir las postulaciones de la sociedad civil, pasando por encima del Comité de Postulaciones Electorales, entre otras gravísimas irregularidades, da al traste con la necesidad que tiene el país de contar con un árbitro electoral imparcial y equilibrado, que debería ser la primera condición electoral de muchas otras que son necesarias para afirmar con certeza que es posible la realización de una elección legítima, justa y transparente en Venezuela».
Este comunicado está firmado por Acción Democrática, Un Nuevo Tiempo, Primero Justicia, Voluntad Popular, Encuentro Ciudadano, Copei, La Causa R, Proyecto Venezuela, Movimiento Progresista de Venezuela, Nuvipa y Cuentas Claras.
En él también denuncian ante la opinión popular y la comunidad internacional «la pretensión de robarle a los partidos políticos democráticos sus tarjetas y símbolos partidistas para entregárselas a falsos líderes opositores que, luego de haber sido comprados por la dictadura y sin la más mínima vergüenza, pretenden convalidar otro fraude electoral».
Ellos aseguran que «este arrebato se ejecutaría mediante supuestas acciones judiciales irritas ante los jueves al servicio del régimen, tal como lo hicieron en el pasado con organizaciones políticas como Podemos, Patria para Todos, Bandera Roja y Copei».
De allí que aseguren que «no convalidaremos ni reconoceremos ninguna farsa electoral montada por la dictadura para su propia conveniencia, ni mucho menos los resultados dados por unos supuestos rectores elegidos a dedo por el dictador a través de su legión de juristas del horror».
Por ello aseguran «nuestra disposición de lucha por lograr la libertad de nuestro país y regresarle al pueblo venezolano su cualidad soberana, su democracia, crece cada día más».