Las autoridades peruanas instalaron 20 controles policiales en la ciudad de Tacna para reforzar la frontera con Chile y con esto «impedir el ingreso de migrantes” que no tengan su documentación en regla, aseguró el Ministerio del Interior, este viernes 5 de mayo.
Los puestos están en un recorrido de 12,5 kilómetros de la línea de frontera y están a cargo de la Policía Nacional de Perú (PNP).
«El patrullaje es permanente, las 24 horas del día, por ese motivo se han instalado 24 carpas, cuatro de ellas son especiales, destinadas para el alojamiento del personal, además de 15 baños químicos portátiles», indicó el Ministerio de Interior.
El Ministerio del Interior detalló que desde la visita del ministro Vicente Romero a la zona fronteriza con Chile hace unos días, se desplegaron un total de 450 efectivos pertenecientes a diferentes regiones y unidades policiales.
El comunicado destaca que, en Tacna, la Policía Nacional, además de cumplir «un papel importante en el control del orden público y la seguridad», también sumó esfuerzos «para brindar apoyo a migrantes que ingresaron a territorio nacional y actualmente ocupan calles y parques de la ciudad».
Desde hace varias semanas, cientos de migrantes que decidieron salir de Chile, la mayoría de ellos de nacionalidad venezolana y haitiana, están varados en la frontera entre Chile y Perú en condiciones críticas y sin documentación para entrar a otros países de la región.
Según Amnistía Internacional, al menos 300 personas están en esa zona fronteriza entre ambos países «en una situación humanitaria crítica, sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria en el desierto conocido por sus condiciones extremas».
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