Indígenas de las comunidades Yukpas en la cuenca de El Tukuko denuncian que grupos armados y bandas delictivas se enfrentan entre sí provocando un estado zozobra y alarma en la población.
Líderes de estas comunidades alertan también sobre la presencia de personas desconocidas dentro de sus territorios fuertemente armadas.
Algunos habitantes informaron que luego del hecho registrado el jueves 16 de enero, en el cual dos hombres fueron heridos de bala, el ambiente en la comunidad de El Tukuko es de tensa calma por la presencia de estos grupos generadores de violencia.
Al parecer, de acuerdo a las denuncias, hay jóvenes Yukpas del sector conocido como Kuse que pertenecen a estas bandas delictivas. Se amparan en la impunidad «porque no existe ninguna autoridad que los castigue».
Por esta situación exigen la presencia de la FANB para que la comunidad se sienta más segura y custodiada. Los habitantes piden igualmente que se detenga el contrabando de ganado y de productos.
Las familias también demandan a los caciques tomar acciones para garantizar la tranquilidad y armonía en la zona. Esperaban este martes la llegada de Fray Nelson Sandoval para coordinar con las escuelas una reunión con los padres para emitir un comunicado rechazando esta situación.
Los maestros de El Tukuko recalcaron que estos enfrentamientos son ajenos a la comunidad. «Rechazamos enérgicamente estos actos violentos…no podemos quedarnos tranquilos».
Reprueban falsas informaciones
Otros habitantes de esta zona de la Sierra de Perijá rechazan unas declaraciones que habría dado el señor Lusbi Portillo «queriendo desprestigiar y mal poner a nuestra comunidad».
«Nosotros no somos los violentos», dijo otra de las personas.
Esperan que este ambiente no termine de afectar el intercambio comercial de la parte alta de la Sierra de Perijá.