Piloto y avioneta siniestrada en Maturín estarían vinculados al narcotráfico

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Fotos: Red Digital Noticias

Tras conocerse el pasado sábado que una avioneta se estrelló en el sector Brisas del Aeropuerto, en Maturín, muy cerca del Aeropuerto Internacional José Tadeo Monagas de Monagas, las autoridades han señalado que la misma estaría vinculada con el trafico de drogas en el oriente venezolano.

La aeronave YV 1912, conducida por un ciudadano identificado como Sandro Ercoli, se encuentra registrada en lista de aeronaves solicitadas por el Departamento de Administración de Control de Drogas de Estados Unidos, según informara el director del puerto aéreo Coronel Carlos Corbal.

La aeronave había partidos del aeropuerto de Maturín a las 4:15 de la tarde del sábado 21 de agosto y a los pocos minutos se registró el accidente ante el asombro de los vecinos que residen en el sector dos de Los Almendros, parroquia Las Cocuizas, y quienes contaron que la aeronave fue perdiendo altura y se precipitó a tierra sobre el patio de una vivienda.

Por lo pronto, no se reportaron victimas y el piloto solo sufrió heridas superficiales y moretones. Luego fue retenido por funcionarios de seguridad.

Los vecinos de Brisas del Aeropuerto y los Almendrones Dos han denunciado que desde el inicio de la pandemia esta sería la tercera aeronave siniestrada en la zona por lo que pidieron mejorar la revisión de estos aparatos que salen de la terminal aérea.

Los cuerpos policiales acordonaron la zona y trasladaron la aeronave para iniciar con las investigaciones al estar supuestamente implicado el piloto con nexos con el narcotráfico.

De hecho, El Departamento de Justicia de EE. UU. introdujo un expediente ante la Corte del Distrito de Columbia, en 2014, en contra de ocho hombres y dos mujeres, entre ellos José María Corredor-Ibagué, alias “el Boyaco”; el brasileño Carlos Iván Mendes-Mesquita; y el piloto venezolano Sandro Enrique Ercoli García.

A pesar de que los otros implicados por la justicia estadounidense y de otros países, Ercoli García continuaba libre, aunque estuvo poco tiempo detenido a solicitud del Ministerio Público venezolano por supuestamente colaborar en la fuga del empresario Jhon Alexander Quiroz, quien era el propietario de la concesionaria de vehículos La Venezolana, una empresa que estafó a cientos de compradores