Silvia Martínez, una diseñadora gráfico de San Cristóbal, afirmó que se ha tenido que convertir en una vendedora ambulante para poder garantizar la comida a sus hijos.
Cuando se le preguntó por qué tomó esta decisión, no dudó en contestar: “de cuatro a cinco vendedores ves en la calle todos los días. Creo que no necesita explicación”.
“La crisis del país nos hace salir a las calles a buscar dinero para nuestros hijos, no hay de otra”, afirmó Martínez al ser abordada por Radio Fe y Alegría Noticias.
Ella tenía un trabajo en una oficina pero lo perdió cuando llegó el Coronavirus al país y se consumió sus ahorros rápidos.
Otros profesionales como ingenieros, arquitectos o profesores también han tenido que tomar decisiones parecidas a la de Silvia.
“Yo soy abogado y ejercía, pero a raíz del Coronavirus los tribunales cerraron y me vi en la obligación de empezar a trabajar de esta manera informal”, dijo otro ciudadano que también se ha convertido en buhonero.
Por Jorge Labrador | Radio Fe y Alegría Noticias