La crisis económica, política y social que afecta a Venezuela durante más de una década ha dejado cicatrices profundas en el sistema educativo del país y los profesores universitarios son víctimas directas de esta situación desesperante.
Los salarios de los profesores universitarios venezolanos han alcanzado niveles alarmantes, siendo los más bajos de América Latina y del mundo. Con un sueldo promedio de 522 bolívares (o menos de 15 dólares estadounidenses), muchos educadores se ven forzados a tomar empleos adicionales y hasta informales para poder cubrir las necesidades básicas de sus familias.
Esta precariedad económica se traduce en una situación extrema: profesionales altamente capacitados abandonan la docencia en busca de oportunidades más sustentables.
Pero la lucha de los profesores va más allá de lo financiero. Enfrentan diariamente la escasez de insumos y materiales para enseñar, así como la constante amenaza de la inseguridad en los campus universitarios.
La censura gubernamental también se cierne sobre las instituciones educativas, limitando la libertad académica.
A pesar de estas adversidades, los profesores universitarios alzan su voz en un coro unísono de resistencia, encabezando protestas para exigir mejoras en sus condiciones laborales y calidad educativa.
Este año 2023 estuvo marcado por varias manifestaciones y conversaciones con el Gobierno que aún no han rendido frutos, pero allí están los profesores universitarios, recordando que la educación no solo es un derecho fundamental, sino también un pilar esencial para la construcción de un futuro sólido, prometedor, democrático y plural.
Sigue todas nuestras entrevistas y la información que se produce desde las regiones uniéndote a nuestro canal de Telegram.
