El presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó un decreto este martes 27 de diciembre que prohíbe el suministro de petróleo a las naciones que apliquen el tope a los precios del crudo ruso. El mismo está fijado desde principios de diciembre en 60 dólares el barril por la Unión Europea, el G7 y Australia.
La medida de Putin sobre la venta de petróleo será a partir del 1 de febrero y se aplicará hasta el 1 de julio de 2023, según la agencia AFP.
El tope impuesto por las principales potencias del mundo forma parte de las sanciones impuestas a Rusia tras su invasión a Ucrania el pasado 24 de febrero en la llamada «operación militar especial».
Las exportaciones de crudo estarán prohibidas a partir del 1 de febrero, pero la fecha para la prohibición de los productos derivados del petróleo será determinada por el gobierno ruso y podría ser posterior.
El decreto incluye una cláusula que permite a Putin anular la prohibición en casos especiales.
Ucrania sin electricidad
Entre tanto, más de 9 millones de ucranianos continúan sin electricidad tras los últimos ataques rusos contra infraestructuras estratégicas del país. Esto impide acceder a servicios como la calefacción o el agua potable en medio de un clima invernal.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo en un mensaje publicado la noche de este lunes que “sufren” casi todas las regiones del país en medio de las celebraciones de Navidad.
Con información de AFP y EFE
