La Red de Observación Electoral de Asamblea de Educación (ROAE) emitió un comunicado de «alerta» respecto al inicio de las auditorías técnicas con miras a las elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre.
En el texto, aseguraron «todavía se desconoce si el CNE invitará a las organizaciones observadoras nacionales e internacionales a presenciar, constatar y validar las diferentes etapas del proceso». Este proceso inició el pasado viernes 14 de agosto.
Estas auditorías, explicó la Red, permiten certificar el buen desarrollo y la transparencia de cada parte del proceso relacionado con la elección, desde el registro de votantes hasta la totalización de resultados y las auditorías postelectorales.
En el caso de un proceso automatizado, apuntaron, las auditorías permiten constatar las producción de las máquinas de votación, el software que utilizarán, el sistema de identificación biométrica, la transmitión de la data, la totalización de los resultados y otros elementos.
Sin embargo, al analizar el cronograma electoral emitido por el propio CNE, pudieron notar ciertas «insuficiencias», entre las que están:
- La mayoría de las actividades en 2020, particularmente las auditorías, están definidas de forma similar a las realizadas en las Elecciones Parlamentarias de 2015, aún cuando las condiciones de movilidad y trabajo son radicalmente distintas debido a las restricciones impuestas por la COVID-19.
- Igual que en procesos pasados, no se contemplan auditorías relacionadas con los aspectos administrativos, contrataciones, licitaciones ni alguna otra etapa de las decisiones sobre infraestructura. Aunque estos procesos son responsabilidad del CNE, es imperioso que exista transparencia en estos temas, para que se puedan comparar las distintas alternativas tecnológicas presentadas.
- Los lapsos establecidos para diversas auditorías son insuficientes, dado que se desconoce la naturaleza precisa de la nueva plataforma electoral, que, cabe suponer, no estará basada en la tecnología de la compañía Smartmatic, hasta ahora utilizada. El software usado hasta el 2018, por ejemplo, estaba parcialmente certificado en eventos previos, lo cual permitía reducir el tiempo requerido para su auditoría.
- Se introduce una etapa llamada Producción de Instrumentos Electorales Codificados, sobre la que no hay información publica que permita saber en qué consiste y si requiere de un proceso de auditoría para su verificación.
- No está prevista ninguna auditoría en el proceso para las elecciones de Representantes Indígenas.
Hasta el momento, no ha habido pronunciamiento alguno del Poder Electoral respecto a este punto de las auditorías y las organizaciones que participarán.
