En la alta competencia es muy importante tener la mejor condición física y haber realizado un excelente proceso preparación y suma de experiencia para asumir las competencias internacionales, sin embargo, los detalles pueden hacer la diferencia final.
La anécdota del esgrimista Rubén Limardo ratifica la importancia de saber esperar y actuar justo en el momento preciso.
Limardo publicó un anécdota de un combate con el estadounidense Weston Kelsey, quien derrotó a Rubén en dos ocasiones consecutivas en un evento en Guadalajara 2011.
El norteamericano es poseedor de una técnica extraordinaria y un físico de dos metros de altura que lo coloca en lo más alto de la élite, según el propio Rubén Limardo.
Un año después, en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, logró derrotarlo en la semifinal después de saber esperar el momento justo para atacar: “supe esperar, ahí pacientemente en el segundo 32 del match en muerte súbita de la semifinal marqué uno de los puntos más importantes de mi vida. El resto ya es historia”.
En la final de los Olímpicos de Londres 2012 obtuvo la medalla de oro.
“Hay que esperar cuando se está desesperado, y andar cuando se espera”. Gustave Flaubert
— Rubén Limardo Gascón (@rubenoszki) February 19, 2020
Les cuento una anécdota: Un año antes de esta acción el rival de Estados Unidos Weston Kelsey me había derrotado dos veces, si!! dos veces seguidas en un mismo evento (sigue) pic.twitter.com/ePiCsKmR17