El gobierno ruso atacó este viernes 13 de mayo una refinería ucraniana en Kemenchuk, en el centro del país, que estaba abasteciendo a las tropas ucranianas, así lo confirmó el Ministerio ruso de Defensa, según EFE.
Según el portavoz castrense Igor Konashenkov, la fábrica, ubicada en la región de Poltava, fue alcanzada con armas de alta precisión.
“Se destruyeron las instalaciones de la fábrica y depósitos con gasolina y petróleo diésel, destinados al abastecimiento del Ejército ucraniano”, señaló.
A la vez, en la región de Járkov (este) fueron destruidas dos lanzaderas de misiles Grad y un radar de fabricación estadounidense.
El Ministerio ruso también informó del derribo de un avión SU-27 cerca de la localidad de Lozovaya en la región de Járkov.