Ya son 93 los muertos y más de 150 heridos, en su mayoría funcionarios de la policía, tras el ataque suicida cometido este lunes en una mezquita en el noroeste de Pakistán.
Asim Khan, portavoz del Hospital Lady Reading de la ciudad de Peshawar, donde ocurrió el atentado, dijo a EFE que los heridos se encuentran en estado crítico.
Después de más de 20 horas de trabajo, las fuerzas continúan removiendo de manera manual escombros con las sospechas de que podrían haber todavía más cuerpos bajo las ruinas.
El ataque tuvo lugar hacia el mediodía en una mezquita del área de Police Lines, un centro residencial y de entrenamiento para policías, lo que explica el alto número de víctimas funcionarios.
Para el momento del suceso, más de 300 fieles se encontraban en el recinto ofreciendo las habituales oraciones de la tarde cuando el atacante suicida detonó los explosivos, haciendo volar el techo de la mezquita.
El resurgimiento de los ataques a mezquitas
Uno de los ataques mas atroces ocurrió en 2018 contra un mitin en Baluchistán que causó 128 muertos y 122 heridos. El grupo yihadista Estado Islámicose atribuyó el atentado.
El resurgimiento de los atentados son cada vez más claros, según agencias internacionales. Esto mientras empeoran las relaciones entre Pakistán y un Afganistán bajo el Gobierno interino de los talibanes que se hicieron con el poder en agosto de 2021.
Un mensaje en una cuenta en Twitter asociada con el comandante talibán paquistaní Mohmand se atribuía la responsabilidad del ataque, Sin embargo, la veracidad de esta afirmación ha sido confirmada por las autoridades, afirman agencias.
Además, el Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), el principal grupo talibán paquistaní, negó categóricamente su participación en el ataque cometido contra un espacio sagrado, una acción que iría en contra de las normas del grupo terrorista.
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