Simpatizantes del exdictador de Perú, Alberto Fujimori, se reunieron a las afueras del Penal de Barbadillo para esperar su liberación, luego de que el Tribunal Constitucional (TC) de Perú emitiera este martes una sentencia que autoriza su excarcelación inmediata.
Fujimori, de 85 años, padece una serie de afecciones, tales como cáncer lingual, hipertensión, fibrilación auricular y dolencia pulmonar, por lo que el TC justificó su decisión alegando que su salud está “resquebrajada”.
“Eso va a ser lo mejor (su liberación), sobre todo para el país, porque lo necesitamos, él ha manejado muy bien la economía del país, y no solo eso, sino todo lo que refiere a salud y educación, y a nosotros nos consta”, expresó una trabajadora social que se encontraba en el Penal de Barbadillo, en entrevista para el periodista Luis Natera.
“Él nos va a salvar de la economía en la que estamos viviendo actualmente, porque todos son meramente ignorantes políticos”, agregó.
Sin embargo, Natera explicó durante un contacto informativo con el programa Punto y Seguimos de Radio Fe y Alegría Noticias que la decisión está a la espera de ser acatada o no por el Ejecutivo, siendo el Instituto Nacional de Penitenciaría el órgano encargado de ejecutar la orden.
Acusaciones
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) exhortó el año pasado a “abstenerse de otorgar un indulto ‘por razones humanitarias’ en cumplimiento de los estándares interamericanos establecidos en las resoluciones de supervisión de los casos Barrios Altos y La Cantuta”.
A Fujimori se le acusó en 2009 de ser el autor intelectual de 25 asesinatos y lesiones graves cometidas durante su gestión por el “Grupo Colina”, un escuadrón militar clandestino que él manejaba.
Tras la masacre del 3 de noviembre de 1991 en la zona popular de Barrios Altos, donde abatieron a 15 personas, entre ellos un niño de 8 años, Fujimori felicitó al Grupo Colina y le cedió mayores poderes al Servicio de Inteligencia Nacional.
Paralelamente, se le señala como autor intelectual en la matanza de La Cantuta, universidad que forma maestros de escuela, en la que murieron nueve estudiantes y un catedrático.
Durante su periodo de gobierno de 10 años se documentaron violaciones de derechos humanos, como asesinatos, desapariciones forzadas, torturas, malos tratos e incluso esterilizaciones forzadas principalmente a mujeres campesinas e indígenas.
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