Debido al déficit de personal de enfermería en el hospital central de San Cristóbal, solo se cuenta con un poco más del 30% de su recurso humano, lo que se traduce en 420 personas que cumplen labores en ese área de un total de 1300 que debería tener.
Ante esta situación que pone en riesgo la atención especial en el área de aislamiento de COVID-19, Daniel Liscano, presidente del Colegio de Enfermería del estado Táchira alertó que se hace necesario que de manera urgente el Ministerio de Salud mejore las condiciones laborales de este gremio para que sea atractiva su contratación con mejores salarios, pagados en dólares, y que cubran, por lo menos, la canasta básica y la dotación de más equipos de bioseguridad.
La escasez de enfermeros también ha afectado la atención en otros servicios comunes como medicina general, pediatría y cirugía, refería Liscano.
Pone el alarma también en torno a indicar que este déficit de trabajadores para estas tareas «es un problema de salud pública en plena pandemia ya que en un servicio de cuidados intensivos o de aislamiento solo hay una enfermera para atender entre 26 y 28 pacientes, donde la patología de la COVID-19, y sus secuelas, son muy complejas».
Igualmente expresó su preocupación sobre esta situación ya que se está generando un extremo cansancio y desgaste en el poco personal que queda porque tienen que redoblar los turnos de trabajo.
Por Jorge Labrador/Radio Fe y Alegría Noticias