Vladimir Vergara, del equipo de Radio Fe y Alegría Noticias de Mérida, relató lo que padeció, junto a su familia, en la vaguada que se registró en Tovar. Al momento de su reporte no se había restablecido eléctrico en la localidad.
Por fortuna, relató, en donde se encuentra ubicado disfrutando de sus vacaciones laborales, ahora interrumpidas, «la vaguada no nos afectó tanto como sí ocurrió en otros sectores de Tovar».
En su crónica precisó que las lluvias comenzaron «el día lunes, como a las 6:30 de la tarde. Duraron aproximadamente como hasta las 10:30 de la noche. Fueron 4 horas de intensas lluvias».
Por las principales zonas bajas de Tovar pasa el río Mocotíes, el mismo que afectó a esta población merideña en el deslave del año 2005. «Pero la sorpresa de esta semana es que nadie se esperaba que en la zona alta de Tovar fuera a surgir lo que yo llamo ‘un río sobre el asfalto’ que afectó a más de 250 casas», relató.
Entre los sectores afectados Vergara menciona los de El Corozo, Las Acacias, Monseñor Chacón, zona Centro. «Yo me encontraba en la zona media del sector Sabaneta el lunes por la noche y junto con los vecinos veía cómo ese río arrastraba, en lo alto, muebles, neveras y una alta cantidad de escombros. Pensábamos que era unas pocas cosas y nos enteramos que fueron destruidas como unas 150 viviendas».
Ese mismo lunes por la noche «cortaron la electricidad porque en la zona baja de Tovar también creció el Mocotíes, lo que trajo como consecuencia que los escombros que arrastró el río llegaran hasta la sub estación eléctrica y la afectó».
También se interrumpieron las señales telefónicas de las operadoras Movilnet, Digitel y Movistar «lo cual nos ha dejado incomunicados». Fue apenas este jueves que «un comerciante prestó una planta eléctrica para que una radio, de las 20 emisoras que hay en Tovar, saliera al aire. Así fue cómo pudimos escuchar algunos avances con información de lo que estaba ocurriendo».
«Nunca habían visto algo parecido»
Vergara dijo haber escuchado varios testimonios de «personas que llevan 50 años viviendo por acá y decían que nunca habían visto algo parecido a esto. Nadie se esperaba que el río se derrumbara y arrasara con todo desde la zona alta de Tovar».
Recordando la vaguada de 2005 precisó que «en ese momento se registró fue en la zona baja de Tovar que afectó también a Santa Cruz y Bailadores. Recuerdo que al día siguiente ya se observaban helicópteros sobrevolando la zona, ya había respuesta del Ejército y de la Guardia en las calles. Ahora, después de las primeras 48 horas, en el epicentro del desastre, en El Corozo, solamente estaban 3 bomberos con unas carpeticas, sin herramientas».
Todavía hay mucha gente buscando refugio
Reveló que al otro día, otros funcionarios que estaban de guardia «salieron a pedir botas y otros implementos para atender la emergencia. La retirada de escombros, la limpieza y el reacomodo lo están haciendo los mismos ciudadanos».
En tono de denuncia alertó que «todavía este viernes (27) hay personas tratando de buscar donde refugiarse. Se les habilitó el espacio del gimnasio Monseñor Pulido Méndez, que refugió a personas de la vaguada de 2005, pero cuando los funcionarios de seguridad les dijeron a los afectados que los iban a llevar hasta allá, estos no quisieron ir porque la última familia que sacaron de allá estuvo 13 años en ese sitio».
Los perjudicados buscaron ayuda «de familiares, de conocidos, de amigos».
«El transformador me llegaba por las rodillas»
Las calles de Tovar quedaron sepultadas por escombros y barro. Literalmente, así lo contó, «yo estaba caminando por el sector de Las Acacias y el transformador, que siempre está a unos 2 metros del piso, me llegaba por las rodillas».
Dicho de otro modo, el radiofónico describió que «ese deslave aumentó entre 3 y 4 metros el nivel del barro y los escombros en algunos sectores».
A pesar de que algunas maquinarias intentan despejar las vías «anoche (jueves 26) volvió a llover fuerte y esto hizo que algunas casas que no salieron muy afectadas en el primer desastre ahora sí les entró agua y escombros en su interior».
Confirmó que este jueves fue localizado un joven «menor de 25 años que estaba debajo de un carro que estaba tapiado por escombros. Gracias a Dios estaba con vida».
Vladimir también exhortó a las autoridades locales, regionales y nacionales que «sean más precisos con las informaciones. Unos dicen que hay 17 muertos, otros dicen que hay 20».
Informó que desde el día miércoles «ya empezó a entrar parte de la ayuda humanitaria para estas personas afectadas por las fuertes precipitaciones. Ya se han visto carros de la Unicef y de otras instituciones; esto quiere decir que ya se abrió el paso entre Tovar y Mérida».