Los trabajadores metalúrgicos y la policía se enfrentaron este martes en la ciudad de Cádiz, en el sur de España, al final de una marcha de protesta para exigir salarios más altos en línea con la creciente tasa de inflación del país.
La policía utilizó balas de goma para dispersar a los manifestantes que intentaron levantar barricadas en las calles de la ciudad costera.
La manifestación marcó el octavo día consecutivo de protestas y coincidió con una huelga que afectó a toda la provincia de Cádiz en apoyo a la lucha de los metalúrgicos.
La tasa de inflación en España ha alcanzado su nivel más alto en años, impulsada por los costos energéticos. En octubre se situó en el 5,5%.
Eso ha enfurecido a muchas personas cuyos salarios se han estancado. También se han perdido cientos de puestos de trabajo en la provincia de Cádiz, que tiene una tasa de paro del 23%, una de las más altas de España.
Sin acuerdos
Los sindicatos que representan a los trabajadores metalúrgicos y los empresarios llevan días negociando sin llegar a un acuerdo, aunque han dicho que las conversaciones continuarán.
José Muñoz, secretario general de la asociación de trabajadores metalúrgicos FEMCA, dijo a la emisora pública local Canal Sur, que los empresarios están ofreciendo un aumento del 2%, negociable cada año. Aseguró que los sindicatos no aceptan eso.
Según la egencia AP, los trabajadores cortaron carreteras y puentes que conducen a Cádiz durante la semana pasada. También han prendido fuego a algunos coches y barricadas. No ha habido heridos ni daños importantes. El tono general de las protestas es pacífico.
Hay 700 empresas del sector metalmecánico en la provincia de Cádiz, que dan empleo a unas 20.000 personas.
Fuente: ap, @radiocadiz
