La Fundación Un Vaso de Amor arribó a 5 años de fundada este domingo 7 de mayo, atendiendo a más de 130 personas con un plato de alimento en el sector Cujicito de San Juan de los Morros, estado Guárico.
Ana de Andrade, coordinadora de este proyecto, narró a Radio Fe y Alegría Noticias la historia de los primeros pasos de esta obra social que hoy sigue ayudando y educando a un grupo de personas que vive en este sector vulnerable de la capital guariqueña.
“Esta historia comenzó el 7 de mayo 2018 cuando Venezuela estaba pasando por una crisis bastante pronunciada. En ese año eran muchos los niños que dejaban las escuelas porque no tenían qué desayunar y mamás y papás preferían que se quedaran durmiendo en sus casas para darles solamente una comida al día y así evitaban despertarlos”, contó.
“En medio de esa crisis, el Espíritu Santo sopló para que una laica Mercedaría, desde ese gesto de solidaridad, llevara cuatro litros de leche a la escuela artesanal. Esa leche fue repartida a los niños más necesitados y esto se repitió varias semanas hasta que el padre Juan Duque propuso llevar esta acción hasta el sector más vulnerable de La Morera. Entonces se escogió el sector El Cujicito, en las adyacencia en el vertedero de basura”, narró.
Andrade señaló que la fundación comenzó con una bebida nutricional una vez por semana y después se extendió a un plato de comida con su bebida.
“Se comenzó a hacer presencia en el sector todos los días jueves a las 10:00 de la mañana y allí se repartía la bebida nutricional que podía ser fororo, chicha, tizana o cualquier otra. También teníamos un ratico de formación hermano-cristiana de evangelización, dinámicas, cantos y sobre todo ese contacto humano con los niños, con los familiares, madres y representantes”, destacó.
La coordinadora del proyecto agradeció la buena voluntad de un donante que se enteró de lo que hacían y colaboró con una serie de alimentos que dieron inicio a esta obra social.
“Llegó una donación de una persona que no conocíamos, pero que se enteró de lo que estábamos haciendo. Nos llevó caraotas, pasta, leche, azúcar y comenzamos entonces a llevarles una comida semanal, un plato caliente y su bebida”, dijo Andrade.
Plato solidario
La organizadora de Un Vaso de Amor indicó que ya cumplieron un año de ser beneficiados por Cáritas de Venezuela, quienes les envían los insumos para poder atender con un plato de alimento a las personas registradas en su censo.
“Este último año, con la ayuda de Cáritas de Venezuela, llevamos a cabo un proyecto de atención a la población más vulnerable a raíz de la pandemia de la COVID-19. Lo que comenzó con un gesto solidario, continúa siendo un gesto de solidaridad, amor, de caridad, de redención convertido en un comedor solidario”, manifestó.
“Hoy el Vaso de Amor beneficia a 133 personas, entre ellos, a niños, ancianos, personas enfermas y adultos. Tenemos el sueño de seguir humanizando, de seguir evangelizando, de seguir dignificándole a cada niño esa obra de comer. Hasta en eso podemos ver cómo ha crecido el Vaso de Amor, de comer sentados en el suelo, hoy lo hacen en sillas, en mesas y con manteles y se les sirve un plato de comida caliente”, explicó.
Rifa de beneficio de Un Vaso de Amor
Andrade informó que están realizando una rifa para poder construir un comedor solidario y que así niños y niñas puedan contar con un espacio, no solamente para comer, sino para recibir formación educativa y humano-cristiano.
“Queremos que los niños tengan un espacio techado donde puedan comer. Que también en este lugar puedan tener otro tipo de actividades que pueden ser catequesis, tareas dirigidas u otro tipo para el crecimiento humano-cristiano de cada uno de ellos”, destacó.
Es por ello que invitó a todas las personas que quieran colaborar con esta obra a comunicarse al número 0424-3015834.
Sigue todas nuestras entrevistas y la información que se produce desde las regiones uniéndote a nuestro canal de Telegram.
