Un espacio para caminar con Jesús
Oración de la mañana
Sábado 01 de junio de 2024
Por: Mireya Escalante
Todos somos iguales
Si seguimos la trayectoria de Jesús vemos que lo que hacía eran cosas buenas: curaba, abría su corazón misericordioso a todos. Entonces, por qué esta gente, de la que habla la Palabra de hoy, tenía sus dudas y le preguntaban con qué autoridad curaba el sábado, o decía que todos somos iguales a los ojos del Padre o más aún que Él prefería a los más débiles.
Era fuerte para esas autoridades, porque el actuar de Jesús eran amenazas permanentes a su manera de concebir su relación con Dios. Ellos eran los privilegiados, nadie se podía relacionar directamente con Dios si no pasaba por sus manos, eso les daba un poder y una autoridad por todos respetadas.
¿Quién es este? ¿Con cuál autoridad hace lo que hace? Se percibe su rabia.
No somos ajenos a ella. Cuando alguien cercano, que vive como Jesús quisiera, nos reclama en silencio nuestra forma equivocada de actuar, nuestra reacción en lugar de examinarnos y aceptar que estamos equivocados, es la de querer que ese desaparezca, que deje de reclamarnos con su vida, porque seguramente al cambiar perdemos privilegios. Nos enceguece perder posiciones de poder.
Con Tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.