Oración de la mañana. Miércoles 19 de mayo de 2021.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza con María, camino hacia Pentecostés
«La mesa común se construye con el compartir de todos. Y así la fiesta en la Casa del Padre será eterna». Señor Jesús, envía tu Espíritu, para que nos ayude a leer la Palabra. Crea en nosotros el silencio para escuchar tu voz en la creación, en los acontecimientos y en las personas, sobre todo en los pobres y en los que sufren. Tu palabra nos oriente a fin de que podamos experimentar la fuerza de tu luz, el fuego del amor y testimoniar que estás vivo en medio de nosotros como fuente de unidad, fraternidad, justicia y paz.
Nos acompaña Pablo el hombre del Espíritu, está María nuestra madre y maestra. Oramos, escuchamos, aprendemos, suplicamos. La primera lección es la del agradecimiento y la generosidad: » hay más alegría en dar que en recibir». Contemplamos una escena conmovedora, de despedida, la misión está cumplida y es hora de partir, así lo hace Pablo. Tú nos regalas una hermosa y exigente oración. «Que todos sean uno», ruegas al Padre por nosotros.
El Evangelio se convierte en la cima de la colina desde la cual se contempla el camino recorrido y lo que falta por recorrer. Es propuesta de ternura y misericordia acogedora; la revelación del rostro de Dios. Con mayor madurez, responsabilidad y decisión caminamos haciendo Iglesia, construyendo comunión.
Enfrentar las dificultades nos ha permitido madurez y crecimiento. Hoy, nos comprometemos a preparar la fiesta del Espíritu, en la alegría de la mesa común, donde hay «pan en abundancia» porque todo se comparte. Ven, Espíritu del Amor a transformar nuestro corazón.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
