Oración de la noche. Miércoles 13 de mayo de 2020.
Por Javier Fuenmayor SJ.
En este momento dispongo y sereno mi espíritu para culminar mi día actualizando la presencia del Padre Bueno de los cielos: Señor, en tus manos encomiendo mi espíritu.
Te agradezco el don de la vida que me has regalado hoy. Cuánta generosidad de tu parte. Mi gratitud infinita por cada detalle por más pequeño que sea.
Desde la mirada de fe contemplo tu paso y discierno aquellas invitaciones particulares que me haces desde el Espíritu, y que resuenan en mí. Ayúdame a captar tu presencia y tu siempre delicada y respetuosa invitación a ser cada día más humano y más hermano de todos.
Me arrepiento si he faltado a tu gracia. Quiero renovar mi deseo de conversión.
Me dispongo plenamente para descansar en tu paz. Es el momento de recuperar fuerzas confiando en tu gracia y tu amor. Que la mirada tierna de nuestra Madre de Fátima me ponga siempre muy cerca de Jesús: Ave, Ave, Ave María; Ave, Ave, Ave María.
Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.