Una Palabra Oportuna No. 527

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Oración de la noche. Miércoles 29 de julio de 2020.

Por  Javier. A. Fuenmayor, SJ.

“El tesoro de su gracia, sabiduría y prudencia ha sido un derroche para nosotros, dándonos a conocer el misterio de su voluntad” (Ef 1, 8-9).

Gracias, mi Dios, por todo lo que nos das.

Me dispongo a discernir tu paso en la vida. Quiero percibir con claridad el paso del Buen Espíritu. El testimonio de Marta me invita a confirmar la fe en ti: “Creo firmemente que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo, el que tenía que venir al mundo” (Jn 11,27).

“Haz de mí un hombre de Fe, Esperanza y Caridad, un hombre de alegre confianza y de paciencia perseverante, de cuerpo puro y de amor a la verdad” (Karl Rahner).

Sana mi corazón con tu misericordia. Perdóname todos mis pecados. Me arrepiento de todo corazón.

“… Te confío mi vida, te la entrego con todo el amor de que soy capaz, porque te amo y necesito darme, ponerme en tus manos sin medida, con total confianza, porque tú eres mi Padre” (Charles de Foucauld). Amén.

Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.