Oración de la mañana. Domingo 13 de Septiembre de 2020.
Por Herlinda Gamboa. Voz Julitze Maryurel.
Cafecito de la esperanza
Señor Jesús, en el amanecer de este nuevo día, salimos a tu encuentro. Concédenos el Espíritu de oración. Ayúdanos a estar ante ti cada día, a buscarte en la acción y en el silencio. Necesitamos fe para ser capaces de perdonar las veces que sea necesario. Concédenos el Espíritu de oración. Queremos aprender a rezar desde la vida, experimentar tu cercanía. Rezar en la tarea cotidiana, escucharte en los hermanos. En las tensiones, contradicciones, encrucijadas, búsquedas que no siempre tienen una respuesta inmediata. Nos seduce, y nos provoca, nos instala y nos desinstala, nos llena de calma y nos mete de lleno en la tormenta».
Hoy la exigencia es grande perdonar siempre, tarea compleja que necesita mucha fe y confianza. Intentamos dar el paso agarrados de tu mano, descubrir y aceptar todo lo que ganamos en este ejercicio multiplicador de la gracia, que resta tanto dolor inútil y absurdo. Nos regalas el perdón. Vete y vive sin temor. Y no cargues el cadáver de ayer sobre tu espalda libre. No nos pides sanear la deuda impagable de habernos vuelto contra ti.
Nos ofreces una vida nueva sin tener que trabajar abrumados por la angustia, pagando los intereses de una cuenta infinita. Perdonas siempre. Setenta veces siete saltas al camino para acoger nuestro regreso, sin cerrarnos el rostro ni racionarnos la palabra, por nuestras fugas repetidas. Hoy te pedimos más todavía: enséñanos a perdonar.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
