Actitudes. Lunes 14 de septiembre de 2020.
Por Antonio Pérez Esclarin.
Valorar al maestro
Nunca han sido los educadores más maltratados que en esos tiempo de pandemia, debieron formase compulsivamente en el uso de las tecnologías, pasaban el día enviando y recibiendo correos y mensajitos de whatsapp, debían revisar cientos de tareas, e incluso producir su propio material didáctico; y a este gigantesco esfuerzo se les premió con unos sueldos miserables, que no les alcanza ni para comer y resultan profundamente desmotivadores, incluso me temo, que se está utilizando la pandemia, para minusvalorar la profesión docente.
Al enviar a la casa tareas, y tener poca o ninguna mediación virtual entre estudiantes y profesores, los padres de familia acaban cumpliendo el papel de docentes, sin estar preparados para ello.
Esto significaría que la tarea docente no tiene valor profesional, pues cualquiera puede hacerla, tratemos a los educadores, de acuerdo a la altísima misión que desempeñan.
Si los médicos son merecedores de un bono en dólares, también lo son los educadores.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.