Espiritualidad. Jueves 15 de octubre de 2020
Por Mireya Escalante.
Atrévete a abrir la puerta. Lucas (11, 47-54)
En el evangelio de hoy Jesús cuestiona muy duramente a los fariseos y doctores de la ley, les llega a decir: ¡Ay de ustedes, porque han guardado la llave de la puerta del saber! Ustedes no han entrado, y a los que iban a entrar les han cerrado el paso”.
Cuando uno oye estas palabras, casi que no les presta atención, porque parecen no estar dirigidas a uno en este momento de nuestra historia.
Te invito a meditarlas y a preguntarte: ¿en algún momento, con mi actuación o mi manera de proceder, le he impedido a alguien conocer la Buena Noticia, fuente del saber, palabra viva?
A lo mejor sin darnos cuenta hemos alejado a algunos de esa puerta de acceso. O puede ser que, por tener una fe infantil, débil, tenemos que esperar a que alguien nos conduzca y nos abra la puerta. Solos somos incapaces de entrar e igualmente nos perdemos del mensaje.
Ojalá seamos audaces, y encontremos la llave de esa puerta, no porque se la tengamos que pedir a otro, sino porque buscamos por nuestros medios entender la palabra, fuente de agua viva del saber y del amor.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.