Oración de la mañana. Domingo 01 de noviembre de 2020.
Por Edgar Magallanes, SJ.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Entro en la presencia de Dios Amor.
Te pido Señor: que yo quiera lo que Tú quieres, que yo haga lo que Tú haces y lo haga a tu modo.
Jesús dice: dichosos los que tienen hambre y sed de justicia porque serán saciados. Dichosos los limpios de corazón porque verán a Dios y los que trabajan por la paz serán llamados hijos de Dios.
Reflexiono:
Las bienaventuranzas no son promesas de algo que ocurrirá luego, sino una invitación a vivir así siempre, con pureza de corazón, trabajando por la paz y viendo a Dios en los más vulnerables.
Me pregunto:
¿Limpio mi corazón y mis ojos para hallar a Dios en mi día a día?
¿Asumo el sueño de Dios para sus hijos como mi objetivo de vida?
Jesús te dice: sígueme y no tengas miedo porque yo estoy contigo.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.