Oración de la noche. Domingo 06 de diciembre de 2020.
Por José Francisco Aranguren, SJ.
Hoy clama mi voz, Padre bueno, para agradecerte por todo lo que me has dado. Ciertamente este pareciera tiempo de pedir tu venida pero yo no te pido nada, solo te agradezco todo lo que me has dado.
Que yo pueda despertar, abrir mis ojos y hacerme presente en cada momento. Estar donde estoy. Por eso, en este momento respiro…me hago presente y consciente…
Actualizo tu presencia en este inicio de la segunda semana de adviento, tiempo para reconocer lo que vas haciendo en mi vida y disponerme a que nazcan y renazcan nuevas aristas de mi vida. Por eso me pregunto, ¿qué realidad personal está pidiendo a gritos un renacimiento? Respiro y hago silencio para pensar en ello…
Agradezco por haber estado contigo en este momento como expresión de dos libertades que se encuentran. Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.