Oración de la noche. Jueves 04 de febrero de 2021.
Por Hna. Elena Azofra
Respiro profundo tres veces.
Tomo conciencia de mis sentimientos profundos nombrándolos (sin calificarlos).
Leo estas palabras del evangelio de Marcos: llamó Jesús a los Doce y los fue enviando de dos en dos, dándoles autoridad sobre los espíritus malignos. Les encargó que llevaran para el camino un bastón y nada más, pero ni pan, ni alforja, ni dinero suelto en la faja; que llevasen sandalias, pero no una túnica de repuesto.
Busco en mi alma el eco espiritual de la palabra evangélica:
• Me ha llamado Jesús a ser de los suyos.
• No estoy solo(a), me ha dado un compañero o compañera de misión.
• Puedo sanear mi ambiente y mi entorno de espíritus maliciosos.
• Conviene llevar una vida sobria y de sencillez.
Cierro los ojos y hago silencio dentro de mí para saborear el mensaje unos segundos.
Tomo conciencia de que Cuidar es Amar y que voy a fraternizar más con mi compañero(a) de misión y juntos sacaremos el espíritu de desconsuelo y desilusión de mi alrededor….
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
