Oración de la noche. Domingo 07 de febrero de 2021.
Por José Francisco Aranguren, SJ.
Padre amoroso, en esta noche vuelvo a ti. Me mueve el deseo del encuentro cercano, silencioso y lleno de sentido que hallo en ti. Eres el Dios que me salva a veces de mí mismo y de mi deseo de búsqueda de placer a cualquier precio. Quiero poner en tus manos mis deseos profundos y mis modos de vérmelas con la realidad, en este momento que vivimos en el país. Hoy quiero oír tu voz y por eso hago silencio en mí para oírte…
Sé que mil años y un segundo son iguales para ti y que vivo atrapado en el tiempo y en el corre corre. Te abro mi corazón en esta noche para que me lo ensanches y cada vez pueda entregarlo a mis hermanos, a los que me rodean, en especial a los que tengo más cerca. Por ello te pido por esos hermanos en el silencio de mi corazón…
Y para finalizar me pongo en tus manos, para vivir cercano a ti esta semana que comienza, sé propicio, alista mis sentidos para que te descubra, ilumíname para que te vea vivo y actuante. Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.