Oración de la mañana. Viernes 19 de febrero de 2021.
Por Herlinda Gamboa. Narra Julitze Mayurel.
Cafecito de la esperanza
Señor Jesús, «en el mundo sobran recetas y faltan cocineros. Sobran análisis y faltan manos. Sobran juicios y faltan abrazos. Por eso quiero gritar para romper esas dinámicas, quiero callar un poco, necesito cantar, servir y amar con sencillez. Menos juicio y más servicio. A veces se me va la vida interpretando, etiquetando, opinando… Tengo que tener una palabra para todo, una palabra definitiva, diferente, especial. Me descubro calificando a las personas. Puedo ser a la vez fiscal y juez, y a menudo sin necesitar pruebas.
«Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios». Porque hay que arrimar el hombro para levantar al afligido. Porque hay que abrazar al solitario que no tiene con quién pasar unas horas. Porque hay que amar al desvalido. Hay que cantar una melodía que caliente el corazón frío. Es tiempo de abrir las ventanas de los lugares oscuros. Hay que temblar al acariciar un rostro sediento de ternura. Y llorar con quien grita, desgarrado, compartir su pena y cambiarla en esperanza. Partir el pan con el hambriento, hasta quedar todos saciados. Entonces la vida cambia, y los pies caminan más ligeros…todo es distinto. Y mejor». Seguimos en Cuaresma.
Danos tu amor y gracia que eso nos basta. Amén. PAZ Y BIEN.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
